En muchos casos, algunas personas sufren accidentes que les dejan temporalmente inhabilitados y requieren fisioterapia especializada para poder rehabilitarse, por ello es obligación de los estados, según la OMS contar con un servicio social para dicha rehabilitación. Es común que en la mayoría de los países se cuente por ello con centros especializados gratuitos para la rehabilitación de aquellas personas que por accidente o enfermedad necesitan tratamiento y cuidado profesional para retomar su vida, sus funciones y actividades del día a día.
Sin embargo, puesto que es un sector con mucha demanda, no ha sido raro que existan desde hace años muchas clínicas especializadas en tratamientos de rehabilitación de todo tipo, ello funciona muy bien para abarcar mayor número de pacientes e incluso darle más opciones a las empresas que, al pagar el seguro social para sus trabajadores, muchas veces incluyen los tratamientos en estas clínicas especializadas, mejorando así la protección laboral y médica a sus trabajados y a los familiares de los mismos.
En el caso de las personas mayores, siendo el primer grupo atendido por estos servicios socio sanitarios de rehabilitación, se persigue contribuir a sacarlos de la situación de dependencia en la que caen por enfermedad o problemas derivados de la edad. La atención a este sector tan vulnerable, forma parte de los servicios de asistencia que identifican a un sistema de gobierno a nivel nacional, regional o local (según sea la responsabilidad o iniciativa) que se preocupa por sus ciudadanos y les atiende incluso en momentos en que su productividad deja de ser lo más rentable, pero que se entiende han aportado a la sociedad y merecen el mejor tratamiento de rehabilitación posible.
Tanto en la familia como para reuniones con sus amigos o las actividades que les plazca hacer, los adultos mayores merecen la mejor calidad de vida.